martes, 26 de abril de 2016

ANDALUCÍA EN LA EDAD MEDIA (II): LA ANDALUCÍA CRISTIANO-MEDIEVAL

La penetración tardía de los cristianos en Andalucía motivó un profundo arraigó de la cultura islámica, cuyo rasgos, incluso hoy en día, perviven en el pueblo andaluz. La repoblación cristiana, emprendida por Alfonso X, va a suponer la reintegración de Andalucía en la cultura cristiano-occidental.
La sociedad de Al-andalus fue plural y compleja. Vivieron en la península distintos pueblos con religiones y culturas diferentes: los cristianos, los musulmanes y los judíos. La pluralidad étnica fomentó una riqueza cultural, caracterizada por la fusión de rasgos de los tres pueblos que fructificaron en espléndidas manifestaciones artísticas que conviven en el tiempo y en el espacio.

EL MUDEJARISMO
El Mudejarismo  consiste en la pervivencia de rasgos islámicos en los estilos artísticos cristianos (románico y gótico) que se concreta en el empleo de materiales como el ladrillo, el yeso, la madera o la cerámica y la introducción de formas y elementos  de construcción musulmanas, especialmente almohades, cuyas técnicas conocían y practicaban los albañiles y maestros de obras musulmanes (alarifes). En Andalucía el estilo mudéjar va unido al estilo gótico y fue un arte popular que hizo pervivir las fórmulas artísticas islámicas, fundiéndolas con las estructuras cristianas del gótico. Hay restos de arquitectura mudéjar por toda Andalucía, pero el principal foco estuvo en el valle del bajo del Guadalquivir, sobre todo en Sevilla, donde el arte mudéjar estuvo impulsado por Pedro I, el cruel, bajo cuyo reinado se construyó el palacio mudéjar del Alcázar sevillano. En la arquitectura religiosa, el mudéjar da lugar a un tipo de iglesia de una o tres naves, con cabecera poligonal, portada abocinada sobre un cuerpo saliente, óculo en la fachada y una torre tipo alminar. Cabe destacar las iglesias sevillanas de Sta. Marina, Sta. Catalina, la iglesia Omnium Sanctorum, el convento de Sta. María de la Rábida en Huelva o la Sinagoga cordobesa.

SINAGOGA CORDOBESA
EL ARTE GÓTICO
El románico y el gótico, aunque tienen su origen en Francia se extienden por todos los territorios de Europa occidental. El románico tiene su época de esplendor entre los siglos X y XII. El sur de la península Ibérica, durante estos siglos estaba ocupado por los musulmanes de Al Andalus, motivo de la insistencia del arte románico en tierras andaluzas. No obstante, cabe destacar la iglesia de Sta. Cruz de Baeza como muestra de románico tardío.

IGLESIA STA. CRUZ DE BAEZA (JAÉN)
Inmediatamente después de la reconquista del valle del Guadalquivir se inicia la castellanización de Andalucía en cuyas creaciones artísticas es notable el eclecticismo o fenómeno híbrido en el que subyace la plena vigencia del arte musulmán, bajo los rasgos cristianos importados por los conquistadores.
Las primeras construcciones cristianas en Andalucía tuvieron carácter militar y son obras de fortificación de las fronteras con los reinos musulmanes. Se erigen castillos en el alto curso del Guadalquivir, destacando los de Alcalá la Real (Jaén), el alcázar cristiano de córdoba, el castillo de almodóvar (Córdoba), el castillo de Moron de la frontera, el castillo de Alcalá de Guadaira, el castillo de Arcos de la Frontera, el castillo de tarifa, el castillo de San Marcos del puerto Santa María (Cádiz) o la torre de Don Fabrique (Sevilla).

CASTILLO DE ALCALÁ DE GUADAÍRA (SEVILLA)
CASTILLO DE ALMODÓVAR (CÓRDOBA)


Las iglesias se levantan sobre las antiguas mezquitas, la arquitectura andaluza cuenta con un gótico característico propiciado por Alfonso X, el sabio. Este "gótico anfonsí" supuso la integración de la sencillez del gótico cisterciense con la plenitud y verticalidad del gótico burgalés y leonés y con el sustrato musulmán, visible sobre todo en el uso del ladrillo junto a la piedra, más escasa y costosa. Son iglesias repartidas por toda la geografía andaluza como por ejemplo Sta. Marina de Córdoba, Sta. Ana de Sevilla, Sta. María de la oliva de Lebrija (Sevilla), San Dionisio de Jerez (Cádiz) o la catedral vieja de Cádiz.

CATEDRAL VIEJA DE CÁDIZ
El edificio emblemático del gótico andaluz es la catedral de Sevilla, construida a lo largo del siglo XV, en un gótico tardío, llamado flamígero o florido, por la complicación de las formas, su elevación y grandiosidad. La catedral de Sevilla posee cinco naves, que se distribuyen con perfecta orientación cristiana, mirando hacia Levante. La impresionante nave central aloja dos carismáticas edificaciones: el coro y la capilla mayor. La capilla Real hace las funciones de cabecera de la catedral, en dicha capilla está ubicado el panteón del Rey San Fernando y de su hijo, Alfonso, junto con los sepulcros de algunos otros miembros de la familia real de la época. Del mismo modo, encontramos en ella a la imagen gótica de Santa María de los Reyes, patrona de Sevilla.

CATEDRAL DE SEVILLA
CATEDRAL DE SEVILLA VISTA AÉREA

lunes, 25 de abril de 2016

ANDALUCÍA EN LA EDAD MEDIA. LA ANDALUCÍA ISLÁMICA: AL-ANDALUS

El Islam es una religión monoteísta con 5 mandamientos: la fe en Alá y en el profeta, la oración 5 veces al día, la limosna, el ayuno en el mes del Ramadán y la peregrinación a la ciudad santa de la Meca. Los principios musulmanes se encuentran escritos en un libro sagrado, el Corán. El Islam crea una nueva era, cuyo punto de partida es el año 622, fecha de la Hégira o huida de Mahoma desde La Meca a Medina. En el año 711, los musulmanes del norte de África penetran en la península Ibérica venciendo a los visigodos en la batalla de Guadalete. Así se inicia la historia de Al Ándalus que terminará en 1492, con la conquista de Granada  por los Reyes Católicos. Los 7 siglos de permanencia de los musulmanes dejarán una profunda huella islámica en la cultura hispánica.
Los musulmanes crean un arte propio e inconfundible que se caracteriza por la fusión de rasgos clásicos, bizantinos, persas, cristianos y de cada uno de los pueblos que dominaron, logrando originales y bellas síntesis.

Urbanismo y arquitectura: La ciudad fue el núcleo de la civilización islámica. Se sitúan en lugares estratégicos (cerros o confluencias de ríos) y su trazado es irregular con calles estrechas y tortuosas. El corazón de la ciudad es la medina, recinto amurallado, donde se ubican los edificios oficiales y de uso colectivo: la mezquita mayor o aljama, el palacio o alcázar, el zoco o mercado o los baños. La vida musulmana gira en torno a los preceptos coránicos, especialmente la oración común de los viernes (día sagrado), así, la mezquita será el eje del arte islámico. Los edificios muestran gran sobriedad exterior reservando el lujo para los interiores, se utilizan materiales pobres como el ladrillo, tapial, yeso y madera. Las cubiertas presentan gran variación, usando techumbres planas o abovedadas y es singular, la creación en Córdoba, de la bóveda califal o de nervios que no se cruzan en el centro. El Corán no prohíbe la representación de imágenes, pero tampoco fomenta la incorporación de temas figurativos, sobre todo en el arte religioso. Así, la escultura y la pintura islámica son escasas, apareciendo tan sólo en ámbitos cortesanos y civiles, especialmente en las artes industriales. En la Alhambra de Granada hay dos curiosas muestras de ambas: Los leones de la fuente del Patio de los leones y las pinturas de la sala de los Reyes.


PINTURAS DE LA SALA DE LOS REYES EN LA ALHAMBRA (GRANADA)


EL ARTE MUSULMÁN EN AL ANDALUS Y SUS ETAPAS

El arte islámico de Al Ándalus se advierte una evolución cuyas etapas están en consonancia con los cambios políticos y económicos. De todas ellas han quedado monumentos emblemáticos por su perfección y belleza.
  •  El arte califal cordobés: Se inicia con el emirato independiente de Abderramán I y termina con la disgregación del califato en los reinos taifas, su momento de apogeo coincide el mandato de Abderramán III, en la Córdoba del siglo X. El arte califal toma elementos del arte romano y visigodo. Del arte bizantino recoge el lujo y colorido de los mosaicos. La mezquita aljama de Córdoba y los restos de la ciudad de Medina Azahara son los monumentos más representativos de esta etapa. Cabe destacar, además, el patio de abluciones de la mezquita de Ibn Adabás de Sevilla, el alminar de la iglesia de San Juan de Córdoba y la mezquita de Almonaster (Huelva).
          
MEZQUITA DE ALMONASTER (HUELVA)

  •  El arte de los reinos taifas: La muerte de Almanzor supone la disgregación del califato cordobés y en el año 1031, se produce la división del mismo en numerosos reinos independientes. De esta etapa hay que destacar las alcazabas de Almería, Málaga y Granada, el bañuelo de Granada y los baños de Villardompardo en Jaén.
         
BAÑUELO DE GRANADA

  •  Las influencias norteafricanas. Almorávides y almohades: Los almorávides generalizan la decoración de mocárabes, especie de estalactitas de yeso, un alfiz que corta los lados de los arcos, el pilar y unas bóvedas de nervios finos o caladas, además de un tipo de residencia con jardines y estanques que son precedentes de los granadinos. En Andalucía se conservan pocos restos almorávides. El dominio almohade dejó en Al Ándalus una profunda huella y una evidente unidad con el norte de África. Construyen fortificaciones con torres defensivas o albarranas. Crearon una decoración característica, consistente en unos entramados de rombos o paños de sebka que recubrirán los muros y utilizaron, además, la cerámica vidriada, los mocárabes, el pilar cuadrado, el arco de herradura apuntado y finas molduras o listeles. También fueron expertos en el arte del metal. Entre las obras dejadas por los almohades hay que destacar la mezquita mayor de Sevilla, de la que se conserva el alminar (la Giralda) y el patio de los Naranjos.
          
PATIO DE LOS NARANJOS Y ALMINAR DE LA MEZQUITA MAYOR (LA GIRALDA)

  •  El arte nazarí del reino de Granada: En el año 1212, los cristianos vencen a los almohades en la batalla de las Navas de Tolosa (Jaén) y aparecen de nuevos los débiles reinos taifas. El más importante será el reino nazarí de Granada. La arquitectura nazarí se caracteriza por su perfecta integración en el entorno, por la sobriedad de los exteriores, por sus formas geométricas puras, por la sabia combinación de espacios cerrados (edificios) y abiertos (patios) y por la profusa decoración de interiores. Utiliza materiales pobres como el tapial y la mampostería. Las columnas nazaritas son finas y esbeltas. Los monumentos emblemáticos son  La Alhambra de Granada y el Generalife, residencia de verano con jardines de refrescantes fuentes. Restos de interés son los alminares malagueños de Salares y Árchez.
          
ALMINAR DE SALARES (MÁLAGA)



  •  Las artes aplicadas en Al Ándalus: Fueron famosos los talleres de Córdoba califal que destacaron en la producción de objetos de marfil para perfumes o joyas, en la metalistería decorativa y en los tejidos lujosos. De ello son exponentes: el bote de Almoguira (museo de Louvre), la cierva de Medina Azahara (museo arqueológico de Córdoba) y la Banda de Hixen II que se conserva en la Academia de la Historia de Madrid. Del siglo X es también el Tesoro de Charilla (museo provincial de Jaén), modelo de orfebrería y numismática (monedas). Por último Córdoba creó un tipo de cuero repujado, los cordobanes. Ya en la Granada nazarí hay que resaltar las ánforas granadinas (Jarro de las Gacelas del museo de la Alhambra) y la riqueza de la espada de Boabdil (museo del ejército de Madrid).
          
CIERVA DE MEDINA AZAHARA

ESPADA DE BOABDIL



lunes, 11 de abril de 2016

ANDALUCÍA VISIGODA

LOS VISIGODOS: Los godos y los germanos fueron los pueblos bárbaros que penetran en el Imperio Romano aprovechándose de su decadencia y ayudando en su caída, dominada por Roma en el año 476 después de Cristo. Esta fecha se considera como el fin de la Edad Antigua y principio de la Edad Media. Los visigodos penetran en la península Ibérica procedentes de la Galia a principios del siglo V, e instalan su capital en Toledo. Otras de las ciudades importantes en la Hispania visigoda serán Sevilla y Córdoba. El dominio visigodo en la Península Ibérica acabará con la invasión musulmana a partir del año 711.

EL ARTE VISIGODO EN ANDALUCÍA: Se va a fraguar a partir del siglo VI, teniendo como referentes el arte paleocristiano y aportaciones orientales y africanas.

  •           Arquitectura: Los restos arquitectónicos visigodos son escasos y mal conservados, lo que no responde a las fuentes históricas que aseguran una gran vitalidad cultural en Andalucía, cuyo foco principal fue la Sevilla de San Isidoro y San Leandro. Cabe destacar los restos de la basílica de Vega del Mar en San Pedro de Alcántara (Málaga).
  •           Escultura: Los restos escultóricos de la Andalucía relacionada con los visigodos, datan del siglo V al VII. Y se reducen a relieves, en los que se advierten técnicas orientales de labrados a bisel que aportan claridad espacial y carácter plano al conjunto. En general son piezas relacionadas con la arquitectura, como capiteles, pilas bautismales, canceles, etc. Algunas piezas a destacar son el cancel de la mezquita de Almonaster (Huelva), los frontales de los sarcófagos de Écija y Alcaudete (Jaén) y la pila bautismal del museo arqueológico de Sevilla.
BASÍLICA DE VEGA DEL MAR






PILA BAUTISMAL MUSEO ARQUEOLÓGICO SEVILLA














Hay que mencionar la importancia de la orfebrería visigoda, que en Andalucía se ejemplifica con el Tesoro de Torredonjimeno (Jaén), El tesoro de influencia bizantina, se compone de coronas votivas de reyes, pequeñas cruces y engarces de cadenetas, El material empleado es el oro, las piedras semipreciosas engastadas en grandes cabujones y el esmalte. Una técnica de orfebrería que confiere al tesoro gran sobriedad, solidez y rico colorido.

TESORO DE TORREDONJIMENO (JAÉN)

EL NACIMIENTO DEL CRISTIANISMO Y EL ARTE PALEOCRISTIANO EN ANDALUCÍA

El Cristianismo surge en Palestina en el siglo I y su difusión se hará a través del Imperio Romano. Perseguido al principio por las autoridades romanas, se practica clandestinamente en las catacumbas. Durante esta etapa el cristianismo rehúye las imágenes, quizás por temor a las autoridades o quizás por influencia judía que no admite representaciones de su Dios. Así, los primitivos cristianos tan sólo se valen de símbolos como el pez, el pan o el cordero. En principio, el arte cristiano toma como modelo el arte romano.
El arte paleocristiano andaluz, su legado es pobre, reduciéndose a restos incompletos y piezas descontextualizadas. Una de las representaciones de Cristo más antiguas es la imagen de un pastor con un carnero sobre los hombros. En Andalucía se conservan tres ejemplares de bulto redondo que se fechan en el siglo IV, el de la Casa de Pilatos de Sevilla, el más bello y mejor conservado.


CRISTO BUEN PASTOR, CASA DE PILATOS (SEVILLA)
  • Los relieves de los sarcófagos paleocristianos: La creencia en la resurrección de los muertos llevó a los cristianos a generalizar la inhumación en el enterramiento de sus difuntos, abandonando la incineración practicada por los romanos. En españa se conservan alrededor de 30 sarcófagos, completos o fragmentados, muchos de los cuales proceden de la Bética, es decir, de Andalucía. Cabe destacar el sarcófago de Carteia en el Museo de Cádiz, el sarcófago del Museo de Córdoba y el sarcófago de Martos (Jaén). 
SARCÓFAGO DE MARTOS (JAÉN)